El Playero se impuso con contundencia ante Welcome. El resultado final indicó 90 a 72, donde la clave estuvo en el segundo cuarto. El equipo de López quebró el juego en ese período al colocar un parcial de 26 a 7.
Con esta victoria Malvín se ubica en el pelotón del segundo lugar de la tabla, junto a Defensor Sporting y Olimpia. Se mantiene en zona segura de clasificación a la Liguilla.
De todos modos, más allá de la clara victoria, seguimos bajando la intensidad defensiva en el segundo tiempo. Ayer recibimos 46 puntos entre el tercer y último cuarto.
Obviamente anoche no fue un problema como sucedió con Goes, el rival era diferente. Pero, aparte del afloje natural por sacar una distancia amplia, sería conveniente no perder tanto la intensidad defensiva.
También es cierto que desde la llegada del Pelado el plantel se estiró mucho más. Todavía Pablo se está adaptando a tener que darle los minutos suficientes a la mayor parte del equipo. En ese sentido a veces da la sensación (todo es muy subjetivo obvio) que apura los cambios en la primera rotación para garantizar minutos a los que vienen desde el banco. Quizá esté equivocado en esa apreciación, pero en realidad sería algo lógico. Tiene jugadores con mucho talento en el banco y debe darle cabida a todos. Esto lleva tiempo para aceitarlo y estamos en esa etapa de acople.
Pero volvamos al partido.
En el primer cuarto Welcome tuvo control del partido. A los dos minutos ganaba 8 a 4. Sus extranjeros estaban en un nivel alto y nosotros tuvimos problemas en los ajustes defensivos. En ataque encontramos soluciones en las manos de Fotis y Glover. De esa manera pasamos 9 a 8. Sin embargo nos volvimos a quedar y con puntos de Wadell y Frye Welcome retoma la delantera. Pasando la mitad del cuarto se alejan 14 a 9. Seguíamos flojos defensivamente y eso se notaba en el marcador. Nos saca del apuro un misil de Marcos y luego llega un doble de Fotis. A falta de 3:30 igualamos en 14. La paridad fue la constante hasta el final. Nos pasan con puntos de Richardson e igualamos con un doblón maravilloso de Hatila tras una asistencia de cirujano de Marcos. Nos vuelven a pasar con un bombazo de Frye y en plena chicharra llega el empate con un zarpazo bárbaro del Pelado. Primer cuarto iguales en 19.
En el segundo cuarto se produjo el momento de quiebre en el partido. Para que eso ocurriera defendimos en gran nivel. Welcome apenas nos convirtió 7 unidades. Pero además, en el rubro ofensivo llegaron excelentes aportes del banco. Entre Pitu y Marcel sumaron 12 unidades en este período. A los dos minutos ganábamos 25 a 21. En ese instante nuestra defensa brilló. Se formó un muro impenetrable que además nos permitió correr la cancha. Con buenos pasajes de Marcel y Pitu aumentamos la ventaja rápidamente. A los cuatro minutos nos alejamos 33 a 21 con un bombazo de nuestro base. Si bien ellos responden con un triple de Varela, llegó la recarga de Marcel para demoler cualquier intento de reacción. Continuamos ampliando la diferencia con el correr de los minutos. Realmente los aplanamos en este cuarto donde vimos a un Malvín en un alto rendimiento. Primer tiempo nuestro 45 a 26.
En el tercer cuarto ellos intentaron reaccionar. En menos de dos minutos colocaron un parcial de 7 a 0. Nos anotaron la misma cantidad de puntos que en todo el segundo cuarto. No supimos mantener nuestra intensidad defensiva. Salimos del ahogo con doble de Glover, pero Welcome continuó insistiendo. A los dos minutos y medio se puso abajo 47 a 37. En ese instante algo cambió en la cancha de Larre Borges, una leve chispa dio inicio a un fuego bestial y todos los presentes nos deleitamos con su llama. Apareció en todo su esplendor Nicolás Mazzarino. El Grado 5 Playero brindó un recital del mejor básquetbol, anotando libres, dobles, triples, realizando asistencias y hasta tomando algún rebote. Se puso al hombro el juego ofensivo y con un destello fulgurante llenó de luz a todos los espectadores sin importar los colores. Con dos o tres jugadas sublimes de Nicolás recuperamos la ventaja del primer tiempo. A los seis minutos ganábamos 62 a 43. Nicolás seguía encendido, terminó el cuarto con 11 puntos, en su mayoría de gran factura técnica. De hecho en este tramo alcanzamos la máxima diferencia en el partido: 25. Salvo que en el cierre cometimos dos pérdidas para terminar el tercer cuarto arriba 71 a 50.
Con esa diferencia el partido ya estaba sentenciado. Para un equipo que pelea en la zona baja de la tabla le resultaba muy complicado descontarle 21 puntos al vigente campeón. De todos modos aprovechó nuestra flojera defensiva para anotar y ganarnos el último cuarto. Nada más podía hacer el equipo de la W.
Triunfo azul 90 a 72.
El viernes recibimos a Trouville, que viene de perder en su casa ante Nacional.
Será un rival difícil. Nosotros llegamos con el objetivo de mantener la racha de victorias y de seguir arriba en la tabla.
A no guardarse nada!
Nos vemos el viernes en el Canil!