El equipo de la Playa cayó anoche en la lucha por un lugar en la Liga Sudamericana. La final entre el ganador del Apertura y el ganador del Clausura se disputó en Maldonado. El encuentro fue cambiante y hubo alargue en 93.
El martes veníamos de ganarle bien a Trouville. Anoche el escenario cambió y nuestro juego también. De los tres pilares que nos han sostenido arriba en la tabla, ayer solamente se vio uno, las asistencias. En defensa y en triples estuvimos muy bajos, fundamentalmente en el primer tiempo, donde fuimos un colador atrás y adelante lanzamos 12 triples y convertimos apenas 2 con un 16 % de efectividad.
Durante todo el partido, entre Nicolás, Will y Hicks tiraron 14 triples y no embocaron ninguno. No es normal. Reitero, 0 de 14 en triples para tres jugadores que siempre superan el 30 % de efectividad. Evidentemente el cambio de cancha no los favoreció, más que nada cuando cambian tanto las referencias.
Pero no fue lo único.
Además, a diferencia del juego anterior, perdimos también en el rubro rebotes. Ellos tomaron 42 y nosotros 37, cuando en el cotejo del martes los superamos en casi el doble.
En el primer cuarto estuvimos en muy bajo nivel en las dos áreas. En ataque erramos mucho y ninguno se destacó en el goleo. A los tres minutos ganábamos 4 a 3 con doble de Nicolás. Pero de allí en más Trouville ajustó mucho mejor la defensa y nos maniató desde el step cuando jugamos el pick. A los cinco minutos perdíamos 11 a 6 con puntos de Shaw. En esta oportunidad sus extranjeros jugaron en gran nivel. Entre los tres sumaron 74 puntos de 110, mientras que los nuestros 47 de 105, con un Roquez volando alto. Sentimos los flojos partidos de Hicks y Will. El Rojo de Pocitos continuó aumentando la brecha, sacando una diferencia de 7 unidades. Descontamos con doble de Kiril, pero ellos enseguida responden con buenos atributos de White. Restando un minuto se van arriba 20 a 8. No embocamos nada de tres, no pudimos correr la cancha y no pudimos desnivelar con las penetraciones de Hicks. Acortamos un poco la ventaja con puntos de Will y un triplazo de Pitu que logró elevar nuestra intensidad en el cierre. Primer cuarto 20 a 13.
Habíamos tenido un primer cuarto malo. Era momento de comenzar a revertirlo desde la defensa. Pero no. En el segundo período recibimos 30 puntos. Un disparate. Al minuto se alejan 25 a 13 con puntos de Oglivie. Pudimos descontar con un buen ingreso de Nicola y un Roquez que se involucró mucho en el juego interior y fue letal con 11 puntos en este cuarto. Con Pitu encendido y con Nicola en cancha logramos correr mejor en ataque rápido y generamos varios puntos desde allí. De todos modos los extranjeros del Rojo mostraban todos sus talentos y no perdonaban. En la mitad del cuarto parecía que nos acomodábamos. Doble y falta para Roquez, un triple para monumento de Pitu y luego doble y falta para nuestro base. Daba la impresión que había llegado la reacción al Campus de Maldonado. Restando cuatro minutos perdíamos 36 a 30. Pero rápidamente Trouville despejó nuestro cerco defensivo con un sólido trabajo de sus extranjeros y buenos aportes de Iglesias. Con un triple de este último vuelven a recuperar la diferencia de 12 unidades. Esta vez no daban ventajas en la pintura a la hora de tomar rebotes. Nosotros erramos mucho y para colmo no podíamos tener segundos tiros. El Box Out Rojo funcionó mucho mejor que el martes y en la recarga ellos lograban lastimar. En el primer tiempo tomaron 19 rebotes y nosotros 12. Por otra parte nosotros nos fuimos al descanso largo con 2 de 12 en triples. Primer tiempo abajo 50 a 40.
Veníamos de recibir 50 unidades en un tiempo. Muchísimas para lo que estamos acostumbrados. Si queríamos ganar teníamos que defender. Y en el tercer cuarto lo hicimos. Un dato no menor al que hacíamos referencia anteriormente. En el primer tiempo el único jugador que anotó desde los 6.75 fue Pitu. Ni Nicolás, ni Marcos, ni Hicks ni Will. Nuestros principales tiradores no habían embocado nada. Teníamos que elevar nuestros porcentajes. Pero arrancamos muy mal. Al minuto y medio del tercer cuarto perdíamos 56 a 40, la mayor ventaja de Trouville en el partido. Estábamos en problemas. En ese momento se encendieron las alarmas y recuperamos nuestra identidad defensiva. Ponemos un parcial de 5 a 0. Si bien ellos nos frenan uno o dos minutos con puntos de Oglivie, nosotros crecemos con anotaciones de Roquez y libres de Hicks. Restando cuatro minutos llega un doblón de Roquez tras asistencia formidable del capitán para arrimarnos 60 a 55. Ya estábamos a dos posesiones. Nos responden con un bombazo de Iglesias y rápidamente contestamos con doble de Nicolás y un misil formidable de Nicola. El viento cambiaba en el Este del país. El Azul de la Playa se había convertido en un torbellino. Faltando 1:30 pasamos con un bombazo de Marcos. Habíamos colocado un parcial de 17 a 7. Ampliamos la ventaja con puntos de Roquez y Facundo. Tercer cuarto nuestro 68 a 65.
El partido se había emparejado. Malvín logró descontar y pasar en base a buena defensa y a una mejora en los porcentajes. Teníamos que defender de la misma manera en el último cuarto. Pero no lo hicimos, nos convirtieron 28 puntos. Demasiados para una final. De todas formas el goleo se abrió para ambos lados y eso nos dio una oportunidad. Comenzamos bien con un misil bárbaro de Marcos. Logramos cierto control del juego. A los dos minutos ganábamos 75 a 68. Pero un minuto después bloqueamos mal el rebote y Oglivie suma doble y libre. Llega un doble de Shaw y en la misma jugada le pitan falta a Nicolás contra Iglesias, más un técnico a nuestro capitán. En ese instante el partido se iguala en 77. Pero otra vez Marcos la mandó guardar y volvemos a recuperar la delantera en el marcador. Pero se esfumó rápidamente. Con puntos de White y de Mayora nos pasan en un lapso breve. A los seis minutos estábamos abajo 85 a 80. Descontamos con libres de Roquez, quien en dos jugadas después le cometen falta antideportiva y marra los dos libres. De todas formas desde el lateral llegan puntos de Hicks para quedar atrás 85 a 84. Ellos se mantienen arriba con doble de Mayora, pero nosotros inclinamos la cancha con puntos de Will y otro bombazo formidable de Pitu más que festejado. Restando 1:37 pasamos 89 a 88. Recuperamos la bola y le cometen falta a Kiril, anota uno y marra el otro. Luego ellos empatan con puntos de White. El trámite estaba sumamente parejo. Ambos marcaban muy mal y recibían muchos puntos. Faltando 30 segundos Pitu anota y nos ponemos en ventaja 93 a 90. Ellos descuentan desde la mano de White. Faltando 27 segundos nosotros teníamos la pelota para atacar y ganábamos por un punto. Cuando comenzó el ataque pensé que Trouville iba a acortar, pero no lo hizo. La posesión se alargó hasta el final, casi. Marcos lanza faltando un segundo para que culminara la posesión. Marró y Hicks pelea el rebote con Mayora. Allí los jueves le pitan falta al panameño y dentro del Campus se origina una enorme polémica. Sin haber visto la tele, en lo personal y desde mi perspectiva, atrás de ese mismo aro, me pareció falta. Mayora va a la línea y anota uno y falla en el otro. Alargue en 93.
Otra vez pensé que era el momento clave de la defensa, pero no. Recibimos 17 puntos en el tiempo complementario. 17 puntos en 5 minutos. Un disparate. Así es imposible ganar. Ellos comienzan arriba con 4 puntos consecutivos de Iglesias. Acortamos la distancia con libres de Pitu. Pero Trouville estaba sólido en sus ofensivas. Con sus extranjeros con muy buenos rendimientos se las ingeniaba para evitar que pasáramos. A falta de dos minutos nos ganaban 101 a 97 luego de un doble de Shaw. Tomamos aire desde la línea con libres de Hicks, pero otra vez Shaw nos amarga con un doble. Necesitábamos descontar rápido, Nicolás lanza de tres y marra. En la recarga le cometemos falta a Iglesias. Si acertaba en los dos libres sentenciaba el juego. Los dos adentro. Faltando 1:17 caíamos 105 a 99. No alcanzaba con dos posesiones. Más allá de un triple de Nicola y de que ellos marraron más libres, el partido se liquidó con la efectividad de iglesias. Resultado final 110 a 105.
Felicitamos a Trouville por su clasificación a la Liga Sudamericana.
Nosotros dejamos en claro que si no somos intensos en defensa vamos a sufrir. Es cierto que no es nada normal que nuestros mejores tiradores no emboquen nada. Estadísticamente es muy difícil que vuelva a repetirse. En ese sentido fue un partido atípico para el Azul de la Playa. Lo bueno es que seguimos manteniendo nuestro buen nivel colectivo. Las 24 asistencias son una prueba fehaciente del trabajo que se viene desarrollando.
El que se viene ahora es Nacional por la Liguilla. El partido se jugará en Florida el día martes a las 20:10.
Te esperamos!!!
Comments 1
Y,…, te faltó decir algo de la exhuberante e inesperada actuación de Roquez. Una golondrina no hace verano, y una gaviota tampoco, pero… jugó para quedarse!