Llegó la lluvia y cambió el viento en el Antel Arena. El equipo de la Playa puso todo su carácter en la cancha, ese mismo que nos permitió lograr la corona en la temporada pasada y salir de momentos complicados como el 1 – 2 frente a Biguá en cuartos de final en este 2019.
Faltando 14 minutos perdíamos 50 a 40. De allí en más los dirigidos por López aparecieron en este pasaje caliente de la serie y colocaron un parcial de 40 a 19. Malvín tuvo el temple necesario para acortar la distancia y evidenciar la supremacía que tuvo en tramos de los dos partidos anteriores.
Faltan 3. Falta mucho. Pero falta menos.
La clave de la victoria fue el carácter de campeón. Ese carácter de campeón que se refleja en la tarea defensiva. En el primer partido recibimos 83 puntos y en el segundo 90. Nos anotaron muchos puntos para una final. Anoche volvimos al marcador que necesitábamos, dejar al rival en el entorno a las 70 unidades. La intensidad defensiva fue vital.
Faltan 3. Falta mucho. Pero falta menos.
En el primer cuarto Mavín sorprendió alternando una zona 2 – 3. Esa defensa en zona la entrenaron cuando fueron a Punta del Este. Cada vez que Malvín anotaba se plantaba en defensa zonal, si marrábamos en ataque defendíamos hombre. Al principio funcionó. A los dos minutos y medio ganábamos 8 a 4, con un Elijah asumiendo mucho en el área rival y castigando al nuevo extranjero Graham. Volcan, consciente que Pablo planteó una defensa diferente y no habitual en él, pidió minuto de tiempo y corrigió. Le salió bien y Aguada respondió con un triple del Mono y puntos consecutivos de Graham. A los seis minutos perdíamos 12 a 8. Aguada logró romper la zona y lo aprovechó al máximo. Salimos del apuro con puntos del capitán y libres de Marcos. Restando tres minutos pasamos 13 a 12. Nos mantenemos arriba buscando el goleo abajo. No tuvimos buen tiro exterior pero logramos lastimar con los internos. Con puntos de DeJuan y de Hatila cerramos arriba el primer cuarto 21 a 18.
Faltan 3. Falta mucho. Pero falta menos.
En el segundo cuarto se nos complicó. Por el lado nuestro, al decir de Diego Nelson Sosa, seguíamos con un bajo porcentaje de libres, y para colmo se agregó un bajísimo porcentaje en triples. Aguada por su parte encontró soluciones efectivas en Thornton que nos castigó a pesar de los cambios de hombre. Con un Thornton muy crecido (15 puntos en el primer tiempo) nos pasan rápidamente 22 a 21. En ataque marramos mucho en el tiro exterior. En todo el primer tiempo lanzamos 7 triples y no convertimos ninguno. Sufríamos desde los 6.75. Además, como decíamos, marramos libres. A los cinco minutos Aguada se distancia 30 a 24 de la mano de un Thornton incontrolable. Tras el mal arranque nos acomodamos con un rebote de ataque de Elijah y con un doblón de zurda de Hatila. Sí, de zurda. El trámite se emparejó en este tramo. Con buenos minutos del Pelado y con un Nicolás un poco más suelto empatamos en 34 a falta de 1:28. Pero en el cierre del primer tiempo Aguada movió mejor la bola y capitalizó su alto porcentaje exterior. Terminó los primeros veinte minutos con 4 de 9 en triples, 2 de ellos en un minuto. Nos lastimaron con cañonazos de Izaguirre y del Mono. Primer tiempo para ellos 40 a 34.
Faltan 3. Falta mucho. Pero falta menos.
Los triples y los libres nos significaban un problema, también el tanteador rival. Necesitábamos defender un poco mejor. En una charla rápida con Pablo en el entretiempo me dijo (y lo cuento porque fue profético) “el partido se está dando para ganarlo desde el tono defensivo del Pitu”). Curiosamente Pablo me dice eso pero no ingresaba Pitu todavía. En ataque generamos buenos tiros exteriores pero con muy baja efectividad. No podíamos anotar de tres y era desesperante. Ellos nos siguieron lastimando con Thornton y puntos de Álvarez. A los tres minutos se van arriba 46 a 36. Hasta este momento habíamos lanzado 10 triples y no habíamos convertido ninguno. Dejamos de lado el tiro exterior y ponemos la pelota en la pintura. Llegan puntos de DeJuan y Hatila para darnos oxígeno. Parecía que se podía dar una reacción. Pero llegó un cañonazo de Pereiras para frenarnos. A los seis minutos perdíamos 50 a 40. Allí Pablo toma la decisión de darle cabida a Pitu como había dicho en el entretiempo. Y el viento cambió. “El partido se está dando para ganarlo desde el tono defensivo del Pitu”. Con un Pitu sublime en defensa Malvín comenzó a cimentar un cambió emocional en la serie. En cuatro minutos nos anotaron 2 puntos, sí 2 puntos. Aguada no tuvo soluciones a la intensidad de nuestra primera línea defensiva liderada por Pitu. Con el candado puesto atrás tuvimos más opciones en ataque. Lamentablemente marramos varios libres. Sin embargo, gracias a la defensa, a falta de dos minutos nos ponemos abajo 50 a 45 tras libre de Nicolás. Ellos encestan de la mano de Feeley. Respondemos con libre de Hatila tras falta de Álvarez. Volvemos a defender duro, Graham marra el lanzamiento y Pitu toma el rebote, corre la cancha y la jugada se da para Marcel que mete un bombazo descomunal tras asistencia de Elijah. Habíamos roto el maleficio de los triples. Por fin llegó el primero a falta de un minuto para el final del tercer período. Ellos intentan responder con un triple de Izaguirre, pero apremiado por el tiempo falla. Elijah toma el rebote y en la carrera asiste a Marcel. En lo personal creí que iba a dejar que el reloj corriera, pero con su temple característico toma una decisión que nos hace saltar a todos los hinchas azules. Tira de tres, casi en la misma posición que el anterior, y no perdona. Con el misil nuclear de Marcel nos vamos arriba 53 a 52. La cantera azul nos sacó del pantano en el Antel Arena. Los trabajos de Pitu y Marcel vitales.
Faltan 3. Falta mucho. Pero falta menos.
En el último cuarto se nos complicó al principio. Marcel, que venía siendo decisivo, convierte una nueva falta personal y debe ir al banco. En su lugar ingresó el Pelado, que anota a la jugada siguiente luego de un rebote de ataque. Al minuto Pitu asiste a Nicolás que la pudre con un bombazo. Nos vamos arriba 58 a 54. Unos segundos más tarde Pitu presiona a Taboada, retiene la bola en sus manos y los jueces pitan salto. Posesión para Malvín tras una gran defensa de Pitu. Luego se da una jugada curiosa de Elijah, marra un doble debajo del aro, toma el rebote, se abre y encesta. Se golpeó la cabeza consciente del doble que había fallado. Pero lo solucionó rápidamente tras el rebote ofensivo. Nos alejamos 60 a 54. Ellos responden con doble de Thornton, que daba la sensación que estaba sintiendo el trajinar del partido y ya no respondía físicamente de la mejor forma. Luego llega una nueva jugada curiosa de Elijah. Se entrevera con la pelota, parece perderla, y cuando daba la sensación que la recuperaba Aguada, se acomoda, lanza de 3 y la manda guardar. Con ese bombazo nos distanciamos 63 a 56. Ellos contestan rápidamente con un triple de Graham. Allí tuvimos la mala fortuna que Hatila erró un tiro fácil. En lugar de colocarnos a 9 puntos, ellos acortan y quedan a 4. Pero Hatila es otro que soluciona su error. Toma un rebote de ataque y nos mantiene a distancia. Sin embargo llegaron dos minutos fatales en ofensiva, No lográbamos sumar. A los cinco minutos Aguada se pone abajo 65 a 63. Pero sí, decilo tranquilo. Pitu. Pitu. Pitu. Ingresa en penetración y convierte en bandeja. Acomodamos las taquicardias de nuevo en el Antel Arena. Los nervios fuera de la cancha nos comían a todos los hinchas azules. Aguada marra sus tiros en las manos de Graham y Feeley. Recuperamos la bola y anotamos con un doblón de Elijah. A falta de 3:25 ganábamos 69 a 63. Necesitábamos mantener la intensidad alta en defensa. Y lo hicimos. Pitu, sí, otra vez Pitu, toma el rebote y arma la jugada para DeJuan. Le cometen falta y va a la línea. Teníamos el problema del bajo porcentaje en libres. Algunos nos comíamos las uñas en la tribuna. Pero DeJuan se plantó y no falló. Los dos libres adentro. Volvemos a defender bien en la recarga aguatera y otra vez DeJuan desnivela en ofensiva, bien secundado por Elijah. Con 4 puntos corridos de nuestros extranjeros sacamos 12 puntos de diferencia a falta de 2:16. Parecía imposible que llegara la derrota. Sin embargo un triple de Graham nos bajó a tierra. No había que confiarse como sucedió en el partido pasado. Atacamos y perdemos la pelota porque expiraron los 24 segundos. Ataca Aguada, Feeley lanza y marra. Sí, otra vez Pitu toma el rebote. Corre y pierde la pelota, aunque daba la impresión que le cometían falta. Allí la jugada del rival tenía destino en Thornton, pero DeJuan realiza un quite sublime y recuperamos la bola. Tras ese formidable recupero Pitu le brinda una asistencia a Nicolás y el tiro del capitán nos hace parar a todos los hinchas azules. Un bombazo que colapsó las gargantas Playeras que rugieron de victoria en el Antel Arena. Con ese cañonazo el partido se sentenció. Todo lo demás sobró. Fue victoria malvinense 80 a 69.
Faltan 3. Falta mucho. Pero falta menos.
Nadie duda de lo importante que es la defensa. Basta volver a las raíces instauradas por Pablo López desde el 2006 para seguir creciendo en la serie. Tras una buena defensa el equipo crece. Ya lo hemos dicho antes. La marca es vital para Malvín. La intensidad atrás nos permite soñar en esta instancia final. A no olvidarse.
Defensa nos pone campeón!!!
El viernes hay que repetir el plato. Mucho carácter para defender y para alentar desde la tribuna. La hinchada Playera dejó la garganta en el Antel Arena como los jugadores dejaron el alma en la cancha. Ese es el camino. Desde el lugar que nos toca, entregar todo.
Las entradas se pondrán a la venta hoy martes. Aún no se sabe el horario pero seguro luego del mediodía.
Que nadie falte el viernes!!!
Juega el campeón!!!
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Apareció el campeón. Apareció el Malvin que queremos. El que lucha, el que juega bien y el que se sobrepone a las adversidades. Anoche cuando no se daba el tiro perimetral, se buscaron otras vías y el equipo respondió, con un Pitu notable y un Marcel por momentos demoledor se descontó la ventaja y se pasó decididamente al frente con un juego sólido pero con unas ganas de ganar encomiables. Muy buena actuación que nos permite tener sólidas esperanzas de lograr el título. Que así sea. VAMOS MALVIN.